En una entrevista en La Libertad, el contador José Bisio, ex jefe de Recaudación municipal, dejó al descubierto la situación financiera más grave en la historia reciente de San Andrés de Giles:
➡️ Deuda oficial al 30 de junio: $1.472.245.965,32
➡️ Déficit creciente: en tres meses subió de $477 millones a $983 millones
➡️ Falta de servicios básicos: caminos rurales destruidos, sin maquinaria ni inversión
➡️ Proveedores impagos: el municipio consume, pero no paga
Bisio explicó que el municipio vive de transferencias de Provincia y Nación. No hay recursos propios, no hay planificación, no hay inversión. Solo deuda y despilfarro.
En lugar de priorizar obras o servicios, se gastaron millones en alquileres y subsidios mal dirigidos. Mientras tanto, los vecinos del campo siguen pagando tasas por servicios que no existen, lo que abre la puerta a reclamos de inconstitucionalidad.
“El municipio está quebrado y no se sabe cómo salir de esta situación”, advirtió Bisio. “Si seguimos así, el futuro es un colapso”.
La realidad es clara: los números no cierran y la plata no aparece. Los gilenses se merecen una gestión que rinda cuentas, que cuide el dinero de la gente y que dé respuestas concretas.
El 7 de septiembre tenemos la oportunidad de ponerle un límite a esta forma de gobernar que solo deja deuda, abandono y frustración.